publicado en nuestroshijos.com
Para padres y maestros: "Jugar a vivir sin... "
MARITZA PEGUERO
"Jugar a vivir sin..."
Algunos humanos somos poseedores de tesoros que a veces no apreciamos sencillamente porque al tenerlos como algo natural no captamos su importancia a menos que suframos la desgracia de perderlos. Nos referimos a los ojos, la voz, las manos, los pies, los dientes, los oídos, la motricidad etc.
Contar con todos esos dones, no notarlo y por ende no agradecerlo es una cosa, pero tenerlo, no aprovecharlos y no compadecernos de quienes carecen de esos regalos que nos da la vida sin nada a cambio es otra cosa.
Por eso, en esta escuela en que nos corresponde muchas veces el papel de profesor un recurso que podemos utilizar para educar a nuestros hijos, a la vez que rememoramos la lección de valorar la vida y las riquezas con que contamos para disfrutarla es “jugar a vivir sin...”
Por ejemplo Jaime, decide que hoy vivirá sin su pie izquierdo. Durante unas horas del día x si tiene que trasladarse dentro de la casa lo hará sin utilizar ese pie que ha designado como inexistente y los demás miembros de la familia serán los guardianes de que lo cumpla al pie de la letra.
Otro ejemplo seria que Mónika decida que hoy vivirá sin hablar, de modo que todos sus actos de ese día deberán ser sin utilizar la voz, debiendo prescindir de ella incluso y sobre todo si la llaman por teléfono, o si alguien requiere su opinión en algún momento. Esta permitido utilizar para comunicarse los gestos, la escritura o cualquier otro recurso que excluya la voz.
Julio Cesar podría por ejemplo vivir sin su mano derecha por un par de horas (el tiempo deberá depender de la edad de los participantes). Mientras dure el juego no podrá escribir con su mano derecha, lo que lo obligara a habilitar su mano izquierda para comer, escribir, asearse etc., con lo cual podrá notar lo maravilloso que es poseer la agilidad de su mano derecha, y se condolerá de quien vea en un futuro con la falta de una extremidad o de ambas y de seguro hará todo lo que este a su alcance para colaborar con esa o esas personas.
Otro de esos invaluables tesoros que poseemos y a veces no cuidamos es la vista, por eso al vivir un día o unas horas sin ver, el niño tendrá la oportunidad de notar la infinidad de cosas que puede hacer con ese maravilloso sentido: ver los colores, las personas, la lluvia, los pajaritos ect. Y al decidir vivir sin la vista por un día se vera precisado a caminar sin ver, saborear sin ver los alimentos, escuchar la televisión sin ver las imágenes etc.
La finalidad de este juego es que los participantes tomen conciencia de las bondades que poseen empiecen a valorarlas y ejerciten su sensibilidad ante aquellos seres que no han sido tan afortunados como ellos y sobre todo que desarrollen la conciencia necesaria para entender que ser diferente no siempre es una elección, sobre todo cuando de la naturaleza se trata, que somos afortunados si poseemos todos nuestros miembros y sentidos intactos y que burlarse de quien carezca de virtudes, cualidades y bienes que poseemos no es correcto y si un acto muy cruel en el cual no debemos incurrir.
miércoles, 16 de julio de 2008
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